Shakira... que pena

Si me conoces sabrás que Shakira no hace el tipo de música que suelo escuchar pero, por alguna extraña razón, me gusta su música. Me gusta desde que publicó en 1998 el ¿Dónde están los ladrones? . Si lo pienso un poco supongo que todo empezó porque era una chica con carácter, con una voz espectacular y muy peculiar, y que además ella misma escribía canciones medio-guitarreras y con buenas letras. Lamentablemente poco a poco ha ido sufriendo una metamorfosis.

Shakira ha pasado de ser una chica con personalidad, morenaza y con curvas a convertirse en otra rubia de bote, delgaducha y que mueve el culo o lo que haga falta en el escenario. Otro producto más de los mass media para vender CDs al peso.

Si escuchas la radio o ves la tele probablemente ya sepas que va a sacar disco nuevo en breve después de bastante tiempo. Pues bien, hoy la he visto en las noticias donde han pasado un trocito del vídeo del primer single (que, por cierto, canta con Alejandro Sanz) en el que sale ella agitando las tetas de modo similar al que solía mover las caderas. Acto seguido, ella misma declaraba que había tenido la intención de que ese movimiento de pecho se convirtiese en el centro del vídeo. ¡Qué más da que ella misma haya compuesto todas las canciones del disco! ¡Qué más da que saque en paralelo otro disco en inglés con canciones también compuestas por ella! Lo importante es como mueve las tetas.

Lamentable.

O no. Sinceramente, su situación me plantea un duda. Si otros individuos patéticos se forran a costa los teenagers, ¿por qué no puede (voluntariamente) convertirse Shakira en un producto mediático si continúa (o continuase) haciendo la música de siempre? ¿Sería más auténtica si en lugar de vender 3 millones vendiese 30.000 copias del disco?

Creo que me da igual. Me temo que sigue haciendo canciones que me gustan y probablemente acabe haciéndome con el disco y lo disfrute como los anteriores.