Filtraciones al mundo exterior

Escribiendo desde un ciber en Buenos Aires. El congreso/workshop acabó. Ha sido una gozada por el tamaño y el ambiente que se ha vivido todos estos días. Ya he cumplido todos mis TODOs: comer dulce de leche, alfajores y havanets; asado, y tomar Quilmes. La gente por aquí es fantástica. Todos muy amables.

Ayer por la noche, después de la clausura, tuvimos una cena también espectacular (pedazo de carne) pero ya en petit-comité. Después, en remís al hotel de Buenos Aires. La habitación del hotel es minúscula, pero está en todo el centro de Buenos Aires. Esta mañana, sin prisa hemos ido a dar una vuelta por la zona. Hemos visitado el Obelisco, la Plaza de Mayo, el barrio de San Anselmo y Puerto Madero, donde hemos comido en un excelente restaurante italiano. Por cierto, mientras íbamos a la Plaza de Mayo había una avenida cortada y al acercanos hemos visto que estaban rodando una película. Justo por el lado que hemos pasado había un monitor con las imágenes que estaban y grabando y, oh sorpresa, parece ser que el protagonista era Ricardo Darín.

En resumen, se podría decir que todo está saliendo genial, si no fuese porque las noticias que tengo de España no acompañan: problemas de salud familiares. Afortunadamente, parece ser que ya todo está controlado.

Si es que... me voy unos días y mi mini-mundo se revoluciona. ;) En fin. Mañana hacia Iguazú. Espero que por allí hayan tantos locutorios (y tan baratos) como por aquí.